La República Popular de China fue sede de los Juegos Olímpicos de 2008, para lo que realizó el proyecto del Estadio Olímpico. Es mundialmente conocido como El Nido de Pájaro, debido a su exterior que se distingue por ser una red de líneas de acero. En él se llevaron a cabo las ceremonias de inauguración y clausura de los Juegos Olímpicos, así como la final de fútbol soccer y las pruebas de atletismo.
El diseño del estadio está basado en los nidos de aves, tanto a nivel estético como a nivel estructural. Su forma ligeramente ondulada le otorga un atractivo visual nunca antes visto en estadios olímpicos.
El techo del estadio está cubierto por una capa de membrana transparente fija y otra membrana traslúcida en la parte inferior. De igual manera tiene un techo acústico que permite un sonido inigualable. El majestuoso Estadio Nacional de Pekín o Beijing tuvo un costo de 500 millones de dólares en una superficie de 258,000 metros cuadrados.
En cuanto a tecnología, el edificio es un pionero en la recolección de energía natural y solar, y cuenta con un sistema de recolección de lluvia para su riego y limpieza. Los arquitectos suizos Jacques Herzog y Pierre de Meuron fueron encargados de la creación de este bello estadio y, de hecho, son los mismos diseñadores del estadio Allianz Arena de Múnich. En sus palabras, este estadio es «un brillante desafío estético y estructural», el cual debía ser cuidadosamente diseñado y estructurado para impresionar a todo el mundo durante las Olimpiadas.
Para su construcción se utilizaron 110,000 toneladas de acero, lo que la vuelve la construcción de acero más grande del mundo. Su capacidad es de 91,000 espectadores y después de los Juegos Olímpicos solamente ha tenido cinco eventos deportivos, entre los cuales está su ceremonia de inauguración en 2009.